Concepto de ‘piel inteligente’ para aeronaves de BAE Systems
Los ingenieros del Centro de Tecnología Avanzada de BAE System están investigando el concepto de una vanguardista tecnología que integrará decenas de miles de microsensores directamente en el revestimiento de las aeronaves, formando una piel inteligente que permitirá ‘sentir’ la velocidad del viento y la temperatura, así como la tensión física.Según el equipo de investigación de la compañía, la tecnología permitirá a las aeronaves controlar su estado y reportar cualquier potencial problema antes de que lleguen a ser significativos. Como resultado, se reduciría la necesidad de revisiones periódicas sobre los activos aéreos, pudiendo ser sustituidas las piezas en el momento oportuno, lo que mejoraría la seguridad en general.
Los diminutos sensores, denominados ‘motas’ por los ingenieros, pueden ser tan pequeños como granos de arroz o incluso como partículas de polvo de menos de un milímetro de ancho. Los sensores tienen su propia fuente de alimentación y se emparejan mediante un software que les permite comunicarse entre sí, de modo similar a la forma en que la piel humana envía señales al cerebro.
BAE Systems afirma que está estudiando varios métodos para aplicar la piel a todo tipo de aeronaves, incluyendo una solución mediante pintura que facilitaría al máximo su implementación, ya que este método permite que los sensores puedan aplicarse a las aeronaves existentes sin la necesidad de modificar significativamente las mismas. No obstante, todavía requiere de un proceso más profundo de desarrollo antes de que veamos su llegada al sector aeronáutico, pudiendo tomar hasta una década la versión definitiva de la tecnología.
La idea del concepto de la ‘piel inteligente’ se ideó cuando la investigadora principal del proyecto, Lydia Hyde, estaba usando su secadora en casa y se dio cuenta que la misma utilizaba un sensor que impedía el sobrecalentamiento. “Observar cómo un simple sensor puede emplearse para detener un sobrecalentamiento en los electrodomésticos, me hizo pensar acerca de cómo esto se podría aplicar a mi trabajo y en la forma de reemplazar sensores caros voluminosos en unos más baratos, pequeños y multifuncionales”, declaró Lydia Hyde, ingeniera de investigación en el Centro de Tecnología Avanzada.
Esto condujo a su vez a la idea de que las aeronaves, incluso barcos o automóviles, podrían ser recubiertos por miles de estas ‘motas’ para crear una piel inteligente que pueda sentir el mundo que les rodea y monitorizar su condición mediante la detección de la tensión, el calor o los daños sufridos. Por lo tanto, la idea final se centró en hacer plataformas que ‘sientan’ usando una piel de sensores de la misma forma que los humanos o los animales lo hacen.
El concepto de la piel inteligente es parte de una serie de nuevas tecnologías que están siendo investigadas por el gigante de defensa británico. A principios de este año, BAE Systems reveló una serie de conceptos futuristas en los que estaban trabajando, incluyendo un avión que puede dividirse en aviones más pequeños, una aeronave que hace drones utilizando impresoras 3D a bordo y un avión con capacidad de autoreparación. El nuevo concepto de piel podría trabajar en conjunto con estas avanzadas tecnologías, permitiendo en un futuro no muy lejano contar con aeronaves capaces de sentir el daño y repararse en pleno vuelo.